- Fomenta la creatividad y la imaginación infantil.
- Es una herramienta muy eficaz para determinar miedos y comportamientos en los niños.
- La recomendación de CEEPI es que los niños jueguen a disfrazarse.
Por la Dra. Claudia Sotelo Arias *
Durante la infancia el juego, la imaginación y la creatividad son elementos fundamentales del desarrollo. Parte de ellos se encuentra representada por el gusto y entusiasmo que tienen los niños al disfrazarse.
El disfraz que el niño elige pueden representar sus fantasías y aspiraciones, permitiéndole experimentar temporalmente roles y comportamientos que de otra manera no serían socialmente aceptados o que se sentirían condenados, como ser los villanos, una bruja mala.
El disfraz ha estado presente desde el inicio de la humanidad y lo sigue estando principalmente en los juegos de los niños. Se trata de una experiencia lúdica que en el fondo mantiene los mismos motivos por los cuales las personas se disfrazaban en otras épocas. Los antiguos chamanes portaban pieles de animales para sustraer, mediante rituales mágicos (cánticos – música – bailes) sus poderes (la fuerza, el valor, la bondad, la malignidad, etcétera).
Ahora los niños modernos también lo hacen, pero como juego. Asimismo en la psicología infantil el disfraz es usado como una herramienta poderosa, porque es posible interpretar los anhelos y los posibles trastornos emocionales en los niños, tanto por el disfraz que escogen como en lo que expresan en el juego»,
Los niños con los disfraces pueden dar rienda suelta a la imaginación, pero principalmente asumen las virtudes del disfraz como sentirse más rápidos y fuertes, que son características inherentes al juego, y el disfraz capitaliza estos anhelos.
Además, un disfraz puede revelar ciertos aspectos de la conducta infantil, es decir, tras analizar el superhéroe o el personaje favorito de cada niño (su disfraz) se pueden develar ciertos aspectos de su personalidad: cualidades, temores e incluso hasta la vocación. El disfraz para los niños es mucho más que una prenda: ofrece la posibilidad de manifestar más la creatividad infantil, de trascender miedos que de otra forma costaría más trabajo hacerlo y claro, diversión en su máxima expresión. Por ello es fundamental que conservemos está tradición en los niños mexicanos.
El disfraz puede otorgar estos beneficios a los niños:
- Permite desinhibirse.. Expresan sus verdaderos anhelos o lo que quieren ser, que por norma o presión social no hacen habitualmente.
- Se entregan a juegos y a desarrollar la creatividad infantil.
- No es casualidad que un niño prefiera determinado disfraz. Lo eligen en función de sus propias características de personalidad; es decir, sus intereses, motivaciones o temores. Por esta razón bajo el disfraz se simulan otros roles diferentes a los habituales y permite estar más cerca de lo que se anhela ser: desde un superhéroe o una princesa, un villano, un personaje histórico o una persona: bombero, médico, enfermera, etcétera.
- Es una forma de liberar el estrés infantil derivado de una intensa carga escolar o extraescolar.
* Soy psicóloga de niños, adolescentes y padres de familia. También soy la directora del CEEPI. Me puede buscar en claudia.sotelo@ceepi.mx